Inicio de un proceso.
El sábado 27 de marzo, fue inaugurado el Ateneo Germinal, en la zona de Villa Colón y Lezica. Desde allí se abre una nueva perspectiva de trabajo social-político con independencia de clase. Desde las páginas de Lucha Libertaria, queríamos difundir y felicitar a los compañeros que han dado su esfuerzo, para que luego de varios años se concrete como una realidad, esa herramienta de lucha tan necesaria en estos tiempos que corren. La inauguración contó con la presencia de varias organizaciones y vecinos de la zona, así como la presencia de los ateneos ya consolidados en otros barrios, y de varias radios comunitarias. Aquí adjuntamos el texto que fue leído por dos integrantes del Ateneo, como presentación del proyecto:
Esta nochecita fueron invitados a la inauguración del Ateneo Germinal. Fueron invitados a conocer lo que, aspiramos llegue a ser también su casa. Eso es lo que nos propusimos un puñado de compañeros, que antes compartíamos un proyecto de radio comunitaria a pocas cuadras de aquí, mudarnos a un lugar más grande y nuestro, seguir saliendo en la radio, pero además, planificamos actividades que pensamos que son una necesidad y un derecho nuestro y de todo el barrio. Y seguir creciendo en la medida que ustedes lo consideren necesario.
Ustedes se preguntarán por qué lo de Ateneo Germinal. Lo de Germinal viene del nombre de esta radio que mantenemos hace más de cinco años. Germinal es, además de un excelente libro de Emilio Zolá, el primer broto de un árbol. Ese primer broto ya viene creciendo. En cuanto a lo de Ateneo, tomamos como referencia histórica el viejo Ateneo Libre Cerro-Teja de los años 50, que nucleaba diversas actividades sociales y culturales, así como apoyó activamente las huelgas frigoríficas y varias luchas populares de la época. Cuando decimos referencia histórica, no significa hacer lo mismo en todos los términos. Se trata más bien de un mismo espíritu impulsor, de una línea de trabajo. Una apuesta a las organizaciones populares de base, con independencia respecto de los aparatos partidarios.
Desde esas organizaciones de base, trabajar en el sentido de la reconstrucción del tejido social solidario. En tiempos de individualismo exacerbado, nos parece prioritario, la apuesta a los procesos y trabajos colectivos. El respeto y la solidaridad como valores fundamentales, que irán gestando un mañana justo. En tal sentido, comienza el Ateneo Germinal, con una serie de actividades específicas propuestas por el grupo inicial.
*Biblioteca: Una biblioteca popular, que iniciamos con libros que han ido donando vecinos e instituciones sociales. Esta biblioteca funciona inicialmente tres días a la semana. Por supuesto que apostamos a un desarrollo mayor, a que esté abierta todos los días y contar con más cantidad de libros. Para la concreción de esto, hace falta integrar más compañeros, más vecinos del barrio al proyecto.
*Talleres de expresión para niños: Se realizarán semanalmente, apuntando a la expresión plástica y teatral. Estos talleres están abiertos a todos los niños de la zona. También estamos instrumentando los talleres de radio para niños, experiencia que ya hicimos el año pasado con los niños de la escuela Zitarrosa.
*Clases de apoyo: Son cursos de apoyatura para estudiantes liceales. En un principio se trata de clases de matemáticas, historia, filosofía y literatura. Se trata de clases gratuitas llevadas adelante por compañeros del Ateneo que estudian en el IPA.
*Cursos de huerta: que estarán a cargo de compañeros del Ateneo que estudian en la Facultad de Agronomía, y estará destinado a todos aquellos que estén interesados en dominar las técnicas de laboreo de la tierra.
*Otras actividades: También está planificado la realización de charlas mensuales acerca de diversos temas, que sean relevantes para la vida del barrio, en esta sociedad de nuestro tiempo. Así mismo, por supuesto que estamos abiertos a nuevas propuestas que vayan llegando. Estas serán discutidas en la Plenaria del Ateneo, y se buscará la forma de instrumentarlas.
*De más estaría decir, que seguiremos con la tarea de la radio, que ahora está transmitiendo los sábados de 11:00 a 24:00, y los domingos de 15:30 a 23:00 hs, en la frecuencia del 107·3 de fm. Con algunos programas nuevos y otros que ya se vienen realizando desde hace tiempo, también con algunos espacios libres en los que ponemos música, hasta que venga alguno de ustedes con alguna idea para que salga al aire. Porque la radio es del barrio y ninguno de nosotros es un profesional en la materia. Somos gente como ustedes, que como ustedes tenemos algo para decir, y que un día nos tiramos al agua, o al aire. Como verán, esto recién está naciendo y de todos depende que siga en marcha. El Ateneo no es un proyecto acabado, sino que es un proceso de construcción colectiva permanente, en que la participación es fundamental para su funcionamiento y desarrollo.
La participación responsable como eje fundamental de la tarea, porque no nos resignamos a pensar que acá no se puede hacer nada y que a esto no lo cambia nadie. Es verdad que nadie lo cambia solo y desorganizado. Pero en la medida en que se vaya cuestionando y rompiendo el aislamiento y la resignación, iremos avanzando. Recreando esos valores de solidaridad y entrega, que hacen a lo mejor de nuestra historia. Que nos hacen sentir de algún modo y humildemente, continuadores de una lucha que empezó hace mucho, y que es mentira que ya se terminó. La pelea por una sociedad más justa, contra la opresión y por la libertad.
Hace más de cinco años, empezábamos con la idea de una radio para el barrio. Y esa pelea por la libertad de expresión sigue y va a seguir. Para que los medios de comunicación estén al servicio de la gente, y no de un puñado de poderosos que montan una industria falseando la realidad. Por eso todos debemos tomar la palabra y decir nuestra verdad. Democratizar las comunicaciones, es un trabajo y un esfuerzo cotidiano. Libertad de expresión en su más ancha extensión hacia toda la vida social.
Esta concepción, este reconocernos como una más de las tantas peleas que se dan en nuestro tiempo, nos ha llevado, a coordinar aquí en la zona, con diversas organizaciones sociales como ser: cooperativas de vivienda, sindicatos, la escuela de la zona, grupos culturales, estudiantiles, la coordinadora de asentamientos, ollas populares y otros grupos sociales de la zona. Romper con la fragmentación de los grupos sociales es vital, que los reclamos no se den de manera aislada, rodear de solidaridad a todos aquellos que están peleando por sus derechos, que también son los nuestros.
Desde el Ateneo, queremos ampliar el espectro, nuclear más actividades, lograr a nivel zonal un vínculo de solidaridad entre los diversos grupos. Articular la resistencia ante la injusticia, en estos tiempos en que no se pueden esperar soluciones mágicas. Para los pobres del mundo todos los tiempos son de pelea. Por eso el contacto y el vínculo son fundamentales, el intercambio con otras experiencias enriquece siempre la propia tarea.
Desde agosto del 2002 en que fuimos allanados dos veces en dos días, venimos manteniendo una coordinación regular con organizaciones de otros barrios. A través del Espacio de Solidaridad y Apoyo Mutuo, se realizó la campaña por la libertad de los presos del hambre, cerca de una treintena de personas. Desde aquel revuelto agosto del 2002 hasta hoy, hemos trabajado diversos ejes temáticos, siempre con el horizonte en la articulación de los grupos sociales independientes. En conflictos sindicales, luchas estudiantiles, en la pelea por los derechos humanos y contra la impunidad, allí hemos estado con el Espacio de Solidaridad como expresión más global de una línea de trabajo. Un trabajo horizontal en sus aspectos organizativos, con absoluta independencia de los partidos políticos.
Poner siempre en primera instancia, a las organizaciones de base con sus peleas concretas, la salud, la educación, la vivienda, el trabajo, el salario, el respeto a los derechos humanos. En esas peleas entramos todos, sin ser furgón de cola de nadie, sin dirigentismos y con apertura. Con respeto a las diferencias y privilegiando siempre lo que une. Aquí habemos compañeros de todo pelo, pero lo importante es que nos une un proyecto de trabajo social.
Hoy comienza una nueva etapa de la tarea. Aquí se da el puntapié inicial para una construcción colectiva, un proceso para la participación responsable. Para saber que en nuestras manos está la posibilidad de generar otro modo de relacio-namiento entre los seres humanos. Ir generando, entre todos, una cultura de la resistencia en sentido positivo. No queremos que en nuestro barrio, ni en ningún otro, haya gurises con hambre y sin escuela. No queremos atropellos policiales, con la excusa de un orden que sólo sirve a unos pocos.
Queremos un ser humano integral en su desarrollo material e intelectual. Es una tarea inmensa, pero desde aquí daremos nuestro granito de arena.
Porque este no es el único mundo posible, se puede y se debe establecer una estructura social que brinde oportunidades a todos y todas.
Se tiene que poder, creemos que se puede, y en ese sendero estamos.
Arriba los que luchan.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.