CARTA OPINIÓN FAU SETIEMBRE 2015
El ajuste que se viene…
Los vaticinios de un nuevo ajuste tienen sustento tanto en la política presupuestal como en la salarial para los trabajadores de la actividad privada. Mientras en los Consejos de Salarios no habrá prácticamente aumento del salario real para nadie (a lo sumo recuperación del IPC y por lo general pérdida de salario), a nivel de los trabajadores del Estado la cosa no va mejor: un presupuesto que casi no incrementa ningún rubro, ni salario ni inversiones. Por tanto, la infraestructura de la salud, la educación y la inversión en vivienda continuarán en los lamentables nivel actuales o incluso se ajustarán.
Desde el gobierno en su conjunto viene augurando tiempos difíciles… Pero no plantean políticas contra-cíclicas ni invertir en las necesidades populares. Sin embargo, las empresas multinacionales siguen sin pagar un peso de impuestos, se embolsan y sacan del país las ganancias e incluso grandes negociados como la absorción de cadenas de supermercados no pagan un vintén a las arcas públicas.
Los dueños del país siguen ganando millones: veamos solamente datos de las exportaciones: Barraca Erro (granos) U$S 264 millones 638 mil dólares, Cereoil (multinacional de granos) U$$ 243 millones, Compañía Forestal Oriental (celulosa) U$S 228 millones, Conaprole U$S 510 millones aproximadamente, según datos del año 2014. Estas grandes empresas son las que nos están robando. Ahí están el dinero para el salario, la vivienda, la salud, la educación. Allí está el dinero que todos generamos y sólo disfrutan los de arriba. Y no se plantea desde el gobierno tocar nada de esto: ni un sólo impuesto más para los burgueses, pero el boleto sube casi un 10%, la carestía es imparable por más acuerdo de precios que hagan…
La esencialidad
Semejante política a gusto de los patrones tiene su claro correlato con la declaración de esencialidad que sufrieron los trabajadores de la enseñanza en huelga. Fue tan grande la resistencia y movilización generadas que el decreto tuvieron que guardárselo, no lo pudieron aplicar, pero quedaron en evidencia sus instintos antipopulares, su odio a los que luchan, mientras desayunan y almuerzan con el empresariado más rancio y los políticos de derecha le golpean la espalda en señal de complacencia por las medidas adoptadas.
Una medida netamente represiva, que nos retrotrae al Pachecato y la Dictadura, que no es un error político ni una burrada. ¿or qué no? Porque la situación económica se viene complicando: han cerrado decenas de fábricas y miles de trabajadores han quedado en la calle, otros miles están en el seguro de paro, el desempleo aumenta levemente pero la tendencia va a ser constante, aumenta la represión en los barrio;, por tanto, la situación social va a ponerse más tensa y desde arriba están preparando el garrote. Esta esencialidad tiene varias finalidades:
1) instalar miedo y derrotar la huelga de la Enseñanza, lo cual no han podido.
2) instalar el tema de la esencialidad y cuestionar el derecho de huelga
3)generar clima de que la situación social- política se puede «picar».
La esencialidad no la pudieron aplicar pero ha quedado planteada la modalidad del gobierno para atender los conflictos. ¿Volverán a insistir con este tipo de medidas? Parece ser que frente al ajuste y la lucha por obtener mayores salarios, mejores condiciones de trabajo y de vida que los de abajo desplegaremos en este período, el gobierno tiene preparado el garrote… Sino pregúntele a los trabajadores de Salud Pública que fueron desalojados por la fuerza de choque.
Represión y hambre…
La política del período va a estar signada por una fuerte apuesta represiva. El mayor incremento presupuestal será el del Ministerio del Interior, principalmente Guardia Republicana, mientras se niegan recursos para la salud, educación y vivienda.Por si fuera poco, este gobierno aplicará una Reforma Educativa similar a la liderada por Germán Rama en 1996 bajo gobierno de Sanguinetti.
No se avizora la creación de nuevos puestos de trabajo ni inversión en desarrollo industrial. Un país sumido en la dependencia económica donde se incrementan los despidos y los envíos al seguro de paro. ¿No habían prometido un «giro a la izquierda» y » no volver a los ’90»? Los de arriba vienen por más. Están sedientos de riquezas y quieren despojar a los de abajo de lo poco que hemos conquistado con esfuerzo de nuestra lucha. Eso es el ajuste.
Una política para los de abajo: Resistencia y Solidaridad
La huelga de la enseñanza nos ha dejado múltiples lecciones: ocupaciones de centros de estudio en los barrios, tejiendo lazos solidarios con trabajadores, vecinos, organizaciones sociales, coordinaciones entre sindicatos, ha amplificado este lucha y la ha rodeado de solidaridad popular. La movilización del 27 de agosto reunió 50 mil personas, la movilización más grande en el marco de un conflicto de la historia del país. Huelga y paros de varios sindicatos cuyos trabajadores se han dignificado y que enseñan quiénes son los enemigos y quiénes los amigos, los compañeros de lucha. La experiencia habla a las claras y ubica a cada cual en su lugar. Nada más aleccionador que una huelga para definir quiénes son los que juegan a la contención en el movimiento popular haciéndole los mandados al gobierno y a los patrones. Y quienes estamos para impulsar la lucha a fondo por objetivos precisos y claros, avanzando hacia nuevos horizontes.
Es desde los barrios, desde los centros de estudio y trabajo donde se construye Solidaridad, tal cual han demostrado los estudiantes ocupando varios liceos y aportando su esfuerzo en esta lucha que también los ha tenido como protagonistas. Rodeando los conflictos, dando una mano en lo que se precise para potencia la lucha y que ésta triunfe, es allí donde nos venimos encontrando un conjunto de compañeros, construyendo Resistencia, construyendo espacios para coordinar luchas y esperanzas.
La salida es desde abajo y con lucha
Ya ha quedado demostrado que no existe «giro a la izquierda», que por Parlamentos, gobiernos y elecciones no hay caminos que conduzcan siquiera a mejoras reales para los de abajo, menos a la emancipación. Una sociedad distinta no se construye con esa herramientas que sólo sirven a la burguesía, porque son sus herramientas. Construir una sociedad distinta es un arduo proceso que necesita de la forja de un pueblo fuerte, asentado en organizaciones sociales firmes, clasistas, con independencia de clase, con fuerte protagonismo popular y democracia directa. Generar los espacios de Resistencia y Solidaridad que permitan ir reconstruyendo los lazos entre los de abajo, entre los que sufrimos este inmundo sistema a diario para avanzar en conquistas, en el fortalecimiento de los organismos populares de base, gestores de un mundo nuevo.
Es necesario la construcción de una corriente dentro del movimiento popular que empuje las luchas, que las tome como propias y brinde esa Solidaridad para que lucha sea un fueguito que encienda un mañana distinto. No es con grandes discursos ni deliberaciones intelectuales que llegará el Socialismo, será sí con mucho esfuerzo, con mucho tesón, con mucha lucha. Es por ello que los anarquista de FAU ponemos nuestro empeño en la construcción de un espacio de Resistencia, que aúne las luchas y las hermane en un solo puño.
MANO TENDIDA AL COMPAÑERO, PUÑO CERRADO AL ENEMIGO
A COSNTRUIR PODER POPULAR!!!
ARRIBA LOS QUE LUCHAN!!
FEDERACIÓN ANARQUISTA URUGUAYA
LOS POBRES QUE EL CAPITALISMO GENERA SE AGOLPAN A LAS PUERTAS DE EUROPA
Inhumanas y crueles son las imágenes que llegan desde Europa: barcos pequeños cargados hasta más no poder de gente, naufragios y muerte en el agua incluso de niños, miles que se agolpan en las fronteras de varios países europeos intentando pasar como se pueda, mercaderes que lucran con la vida humana y el tráfico, miseria y más miseria. Una miseria no casual, ni generada por Dios ni la ignorancia, sino por el Capitalismo, por este sistema inmundo en el que vivimos y por el cual se desarrollan guerras e invasiones a países de Oriente Medio y África por parte de las potencias mundiales, Estados Unidos y Europa.
El control de recursos vitales para las multinacionales, intereses geopolíticos, intentos de desestabilización, varios son los objetivos que mueven a las potencias a intervenir en zonas extremadamente pobres del planeta…para empobrecerlas más. En definitiva, profundizar el sistema, aumentar el despojo, enriquecer a la minoría de ultra ricos, esos objetivos son los que están llevando a cabo los países imperialistas.
Los medios nos informan que «46 países del África subsahariana tienen 767 millones de habitantes; entre ellos, 148 de cada mil nacidos no llegan a cumplir los cinco años, el 45 por ciento de la población no tiene acceso a agua potable, el 63 por ciento no tiene cloacas ni acceso a saneamiento básico, el 32 por ciento está desnutrido, la prevalencia media del SIDA entre jóvenes de entre 14 y 24 años es del cinco por ciento y el 38 por ciento de la población adulta es analfabeta. Entre los más pobres de esta lista de países pobres, están Somalia y Eritrea en guerra interna permanente –Somalía desde hace más de veinte años–, entre señores de la guerra y dictadores armados hasta los dientes con armas de última tecnología. La mayoría de estos países soportan enormes deudas externas que ahogan a sus economías, en muchos casos saqueadas por mineras y trust europeos. Para completar el escenario, el Congo, Liberia, Mali, Sierra Leona, Guinea, Nigeria y Senegal fueron afectados por el virus del Ébola que produjo decenas de miles de muertos. Países africanos como Libia, Congo, Nigeria o Mali soportan guerras internas con grupos armados de fanáticos religiosos financiados por los Emiratos, Arabia Saudita u otras potencias o como en Libia que fue invadida y desestabilizada por una invasión de tropas europeas. Y lo mismo sucede con las guerras en Afganistán, Irak, Siria y Yemen.
De allí provienen las grandes oleadas de migrantes y refugiados que atraviesan montañas, desiertos y mares en condiciones elementales. El 65 por ciento de las personas que han llegado este año a Europa a través del Mediterráneo proviene el 43 por ciento de Siria, el 12 por ciento de Afganistán y el 10 por ciento de Eritrea. El resto se completa con los demás territorios de la lista. Son sociedades cuyas economías han sido arrasadas por abusos y guerras…»
Son millones de personas escapando del horror de la guerra, del hambre, de las persecuciones. Nada muy diferente a nuestros antepasados, que vinieron desde Europa escapando de los mismos problemas. Estos inmigrantes serán mano de obra barata de las empresas europeas, tal cual han señalado las Cámaras Empresariales y el gobierno alemán. De allí la apertura que ha tenido ese país, no fue puro humanitarismo. En cambio Hungría, un país donde gobierna la extrema derecha, crecen las posiciones xenófobas y fascistas, donde incluso están alambrando las fronteras. Por el contrario, los pueblos solidarios han abierto los brazos a la llegada de estos condenados de la tierra y han acogido a los inmigrantes -refugiados. Una Europa que se empobrece cada vez más, donde se quiebra la homogeneidad cultural occidental, una nueva Europa donde las luchas populares van adquiriendo nuevos contornos, nuevas formas y motivos.
Una historia que se repite y una misma lucha que hermana pueblos, en todas partes del mundo la lucha contra la opresión, el hambre, contra este sistema genocida es una lucha que debe convocar al esfuerzo de todos. Aportar para aplacar el sufrimiento humano, pero sobre todo para terminar definitivamente con él y sus causas, que están en la desigualdad, en la acumulación de riquezas, en la propiedad privada, en el poder concentrado en pocas manos… Una lucha que nos convoca a lo largo y ancho del mundo, y que adquiere sus particularidades en cada lugar, en Kurdistán, en África, en Europa, en Uruguay, pero que es la misma: una lucha por el Socialismo y por la Libertad.
ARRIBA LOS QUE LUCHAN!!
FAU